viernes, 1 de mayo de 2015

Mi visita a Omaha

Tener el privilegio de oír a Buffett en persona es, como él mismo lo diría, simple pero no sencillo.
Hay que poseer por lo menos una acción de su compañía (precio de la acción BRK, serie : $94,000
dólares) o tener un amigo accionista que te invite a la reunión.
Esa es justamente la manera en la que abordo un avión, acreditación en mano, para conocer y oír
a quien es, sin lugar a dudas, el personaje que más admiro. Mis amigos suelen vacilarme que, si
pudiera, le pediría un autógrafo en la ropa interior… por si las dudas empaqué un par extra en mi
maleta.
igue el camino amarillo
No estoy sola. Desde el jueves anterior a la reunión 50,000 personas viajan a Nebraska para
presenciar el evento ya sea dentro del auditorio (si cuentan con acceso) o en alguna de las
pantallas gigantes que se instalan en diversos sitios. Toda la ciudad se vuelca a atender a estos
peregrinos inversionistas que portan sus credenciales de acceso alrededor del cuello como una
medalla de honor. Todos los cuartos disponibles a 100 kilómetro a la redonda están llenos,
reservado con un año de anticipación. Los restaurantes, sobre todo los que Buffett considera sus
favoritos, están abarrotados; todos ordenan los platillos favoritos de Warren: T-bone con doble
ración de papas hash brown y Coca Cola. Cómo si el secreto de su éxito financiero estuviera en los
alimentos.
“Hay que llegar a formarse a las 4 de la mañana, me recomiendan. No hay lugares apartados y lo
mejor es formarse temprano para agarrar un buen lugar.” Cuando llegamos a las puertas del
auditorio, a esa hora, estamos bastante adelante pero no somos los primeros en llegar. Poco
después de las 5 am hay miles y miles de personas formadas. Blancos y negros, estadounidenses,
europeos, latinos, chinos y japoneses, parejas de retirados, familias con hijos pequeños, grupos de
viejecitas, estudiantes de negocios, yuppies y hippies. Es como una cola de Disneylandia en donde
todos están leyendo el Wall Street Journal o el Financial Times. lgunos son Buffett virgins y esta
es su primera vez, otros hacen este viaje año con año y se reconocen y saludan en la fila.  las 7 en
punto abren las puertas y empieza una corrida similar a la de la pamplonada. Todos buscan
encontrar buen lugar, lo más adelante posible y junto a los micrófonos, para los que desean
preguntar. Un par de maniobras me ubican en la primerísima fila. La adrenalina es electrizante.
Qué irá a decir? Hablará de u uce or? Qué pien a del mercado de biene  raíce  y de la bol a?
Entran al estadio Warren Buffett y su mano derecha, y vicepresidente de BH, Charlie Munger
(acompañados de otro amigo y directivo de la empresa, un tal Bill… Gates). La única vez que he
visto una reacción similar del público fue en un concierto de Paul McCartney. La gente
literalmente se hiperventila con aplausos.
Buffett y Munger suben al escenario. 35,000 personas quedan en absoluto silencio (ni siquiera en
misa.) y, sin más preámbulos, empieza la sesión de preguntas y respuestas.

No son hombre jóvenes, 78 y 85 años respectivamente, agua y aceite. Un demócrata y un
republicano. Uno excelente orador y otro tajante y al punto. Uno comedor compulsivo de
chocolates y otro de palanqueta de cacahuate (a lo largo de la reunión cada uno se come más de
un kg de dulces). Podrían ser una pareja de comediantes: el gordo y el flaco de las inversiones.
Las dudas sobre lo que son y lo que saben se despejan en el momento en el que empiezan a hablar
sobre los grandes riesgos que existen para las inversiones (el mayor, la inflación); sobre las
acciones  que tomó el gobierno americano en la crisis financiera (muy adecuada  tomando en
cuenta la  circun tancia ), sobre la recuperación del mercado de bienes raíces (en general do
año  para recuperar e, en alguna  zona  meno , en el ur de Florida má ), sobre los planes para un
sucesor (en orden), sobre la educación financiera (no e puede en eñar finanza  a quien no abe
u ar una tarjeta de crédito) y sobre los modelos y fórmulas financieras que utilizan para decidir
qué negocios comprar y en dónde invertir (la  peore  deci ione  de negocio  e tán ba ada  en
modelo  matemático )… Pregunta tras pregunta contestan claros y concisos sin consultar notas ni
usar frases rimbombantes ni rollo superfluo. Gente como uno, simplemente mucho pero mucho
más ricos e inteligentes.
Después de más de 7 horas de información salgo del auditorio y como buena financiera empiezo a
hacer en mi mente un análisis costo-beneficio del evento ¿valió la pena? ¿Estarán las palabras de
Warren Buffet sobrevaluadas o realmente valen la pena? ¿Será este evento más fama que fondo?
Pero no puedo contestarme, en lo único que puedo pensar es cómo voy a conseguir una invitación Para asistir el próximo año.

2 comentarios:

  1. Que tal Adina, he buscado tu currículum y no lo encuentro, ¿Podrías facilitármelo?

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  2. Hola Adina! hace rato no estribes nada, todo bien? muchos saludos!
    Erik

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